Hoy voy a ponerme moralista.
¿Qué narices le pasa a la sociedad en la que vivimos? ¿Qué pasa con los valores? Porque yo los tengo, y además creo que bien arraigados.
¿Por qué existe la deshonestidad, que hace que los que vamos de frente y por derecho, encima nos sintamos asquerosamente sucios y culpables de haber confiado en alguien?
Besos, abrazos, caricias... son tesoros de incalculable valor, no pañuelos de papel de usar y tirar. Yo no los cedo de manera gratuita, pero parece ser que hoy día son monedas de cobre que se intercambian en constantes trueques basados en la superficialidad y el hedonismo más puro.
Pero algo tengo claro: el problema lo tengo yo, porque parece ser que me quedé anclada en el siglo XIX.
...Marianne Dashwood esperando el regreso del coronel Brandon...
¿Qué narices le pasa a la sociedad en la que vivimos? ¿Qué pasa con los valores? Porque yo los tengo, y además creo que bien arraigados.
¿Por qué existe la deshonestidad, que hace que los que vamos de frente y por derecho, encima nos sintamos asquerosamente sucios y culpables de haber confiado en alguien?
Besos, abrazos, caricias... son tesoros de incalculable valor, no pañuelos de papel de usar y tirar. Yo no los cedo de manera gratuita, pero parece ser que hoy día son monedas de cobre que se intercambian en constantes trueques basados en la superficialidad y el hedonismo más puro.
Pero algo tengo claro: el problema lo tengo yo, porque parece ser que me quedé anclada en el siglo XIX.
...Marianne Dashwood esperando el regreso del coronel Brandon...
Catherine Heathcliff.
Lo que estoy escuchando: No More "I Love You's", de Annie Lennox.
2 Comments:
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Bien recalcas que te sueles sentir más como Marianne que como Elinor pero esta entrada es un poco desconcertante...
No sé muy bien sobre qué trata si sobre algo personal o en general pero te digo que a día de hoy las relaciones suelen ser sin "compromisos" y no sé que será del mundo si vamos a peor a cada segundo que pasa.
Besotes y mucho ánimo!
La verdad es que esta entrada es completamente autobiográfica. No hace falta añadir más.
Estoy un tanto asqueada y lo único que me apetece es estar tranquila y sin sobresaltos.
El mundo en el que vivimos va cuesta abajo, sin frenos, en punto muerto y con el embrague pisado.
Gracias, tesoro, un besazo.
Catherine Heathcliff.