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Onegin (1997), de Martha Fiennes

Llevo tiempo queriendo dedicar una entrada en mi blog a esta película. No voy a decir si es buena o mala; tan sólo diré que es mi película favorita, por encima de todas las que he visto en mi vida y todas las que tengo en mi cada día más grande videoteca. En su día no fue una película que movió masas, ni despertó una gran expectación; casi, casi podía considerarse "de autor".

Lo cierto es que está muy bien filmada, con una fotografía preciosa y unas interpretaciones francamente buenas, destacando, por supuesto, al dúo protagonista: Ralph Fiennes y Liv Tyler, Onegin y Tatiana, respectivamente. Yo, sin embargo, me quedo con el papel interpretado por el británico Toby Stephens (hijo en la vida real de la gran Maggie Smith); su rol de Vladimir Lensky, el joven idealista, patética farsa del prototípico (anti)héroe romántico, llega al corazón del espectador. Pobre hombrecillo enamorado y avergonzado de ser provinciano...

Basada en la novela en verso Eugene Onegin, del ruso Alexander Pushkin, y en su ulterior adaptación operística por Tchaikovsky, lo cierto es que la película de Martha Fiennes huye del idealismo romántico de la obra y se centra en retratar personajes y su lucha interior. En ocasiones, numerosas escenas apelan al silencio y son mucho más significativas que otras cargadas de diálogo.

Desde aquí la recomiendo. Eso sí, es una película para degustar poco a poco y sin tener ninguna otra cosa entre manos durante la proyección. Aquí incluyo mi escena favorita, que siempre consigue arrancar de mí alguna lágrima...

Es la escena final, así que esto suponga de advertencia: spoilers!



Catherine Heathcliff.
Lo que estoy escuchando: Acto I: Aria (Eugene Onegin Opera, de Tchaikovsky).

6 Comments:

  1. Anónimo said...
    Yo creía que iba a terminar al estilo Antón Chéjov, con un buen tiro al final.

    Blackwood.
    (`·.·•мαяgун•·.·´) said...
    Ahh!!

    Que casualidad, justo este verano vi la película nunca había oído hablar de ella pero cómo Liv Tyler era una de mis actrices favoritas (porque desde que ha empezado a hacer comedias y eso creo que ha perdido un poco de carisma) entonces decidí ver películas más antiguas suyas y pues esa la vio mi hermana y me dijo que podía verla y aww!! Me gustó mucho, con un final sorprendente... sí, el típico final que me encanta a mí un poco ¿dramático? es que no sé como decirlo pero que me gustan este tipo de finales que no ocurren como el protagonista quiere.

    Besotes!

    P.D.: Perdón por no haber podido comentar en tus anteriores entradas, la anterior a esta me encantó =D
    Catherine Heathcliff said...
    Estimado Blackwood:

    Pues en esta de Pushkin hay buenos tiros también, duelo de "machotes" incluido, pero no al final, sino justo, justo, justo en medio de la trama.

    Te recomiendo muchísimo la novela en verso, y como no, la película.

    Catherine Heathcliff.

    P.D. Es que Antón Chéjov era un poco bruto; Tolstoi era más fino.
    Catherine Heathcliff said...
    Mi niña Margyh:

    ¡Me alegro un montón de que te gustar la peli! Y el final es mi parte favorita. A mí Liv Tyler nunca me hizo excesiva gracia, hasta que la vi en esta película. Su frialdad es perfecta.

    Un beso enorme, princesa.

    P.D. No te preocupes, yo sé que me lees ;)
    Eugenio M. Olivares-Merino said...
    Me han entrado ganas de ver esta peli sobre mi tocayo.
    Otra cosa: voy notando cierta predilección por los Fiennes en tus gustos cinematográficos.
    Saludos desde Utopía.
    Catherine Heathcliff said...
    No te pierdas la película, Eugenio, de veras. Es una gran desconocida, pero merece la pena.

    Los Fiennes me encantan... desde Martha (directora), pasando Ralph y Joseph (actores), hasta Magnus (compositor y autor de la banda sonora de la película).

    Un abrazo,

    Catherine Heathcliff.

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